jueves, 23 de diciembre de 2010

Esferas navideñas


Marcos no tiene ganas de adornar el árbol de Navidad –apenas las ramas asoman diminutos focos de colores–. Cree que no es necesario buscar las esferas ni comprar heno si sólo faltan pocos días para el 25; aunque tuvo la intención de hacerlo, las ganas perecieron al surgir algunos contratiempos durante el día: disminuyeron el suministro de agua en la casa que renta, por desidia apenas fue ayer a pagar el adeudo para la reconexión y le prometieron que al día siguiente estaría fluyendo sin problema el líquido, pero no fue así. Habló por teléfono al encargado de la Comisión en tono de queja, éste contestó: “Hoy no puedo comprometerme a darle el servicio, lo que sí puedo hacer es que mañana tempranito esté listo”, y para colmo, en el trabajo, una empresa transportista no ha liberado la carga en la bodega del cliente porque según el servicio fue contratado en origen a ocurre y no a domicilio, como lo supuso.

“¿No vas a probar mi consomé de pollo?”, cuestiona la esposa. Marcos está más molesto que hambriento. Siente cómo la sangre fluye rápidamente por sus venas y la temperatura del cuerpo aumenta. “Ven a comer”.

Ya en el comedor prueba el caldo, está demasiado caliente. Deja el plato, va a la terraza de la casa. La vista es espectacular, frente a él los pelícanos flotan en el mar, los cerros viejos lucen contentos, verdes; las gaviotas vuelan muy alto en círculo y bajan veloces a pescar; una familia de norteamericanos hunden sus pies en la arena, otros busca en las rocas ostras y conchas, y a pocos centímetros de distancia cangrejos ermitaños cargan su caracol.

Marcos desearía que las personas con las que tiene inconvenientes tuvieran la oportunidad de estar frente al mar, olvidar por instantes la cotidianidad de sus vidas, llenarse de energías con la simplicidad del ave en libertad. Él conoce a profundidad que debe trabajar muchas horas del día para poder gozar la tranquilidad. A sus 55 años quisiera haber tenido la sabiduría y felicidad con la que hoy goza.

Una de las cosas que pueden rescatarse en el puerto es la ausencia de grandes tiendas departamentales, esto arroja como resultado para el consumidor, falta de marcas de renombre. Para tener acceso a ellas se tiene que emigrar a la ciudad de Colima, Guadalajara, pedirlas por encargo o en su caso consumir lo local. La mayoría de los porteños son personas sencillas, no suelen vestir ropas finas ni andar con calzado europeo, tampoco les gusta escuchar la orquesta sinfónica, ni ir al teatro, al cine a ver películas de arte, menos comer langosta y beber vinos.

A ellos les complace usar ropa de alguna marca comercial que esté en boga, comprar zapatillas altas con accesorios –en el caso de las mujeres– y algo cómodo con diseños deportivos o muy varoniles –en caso de los hombres–; bailar banda, rock, salsa o cumbia, asistir al cinema para ver Mi nombre es John Lenon, a la explanada del Pez Vela a contemplar algún espectáculo dominguero, comer taquitos, birria de chivo, pozole y carne asada con cerveza.


En el puerto la gente es feliz un fin de semana en familia, haciendo compras en los tianguis o plazas comerciales; viendo por largas horas el televisor, echándose una cascarita en el futbol, emborrachándose los días de quincena, teniendo hijos, comiendo mucho, pero mal; estudiando para conseguir un título universitario, apoyando campañas políticas de los amigos, criticando el mal estado de las calles, ejercitándose entre el olor a orines y marihuana en el Pasaje Espíritu Santo y el mercado de mariscos.

Más allá del folclore popular existen la clase media alta que poco convive con el costeño; los de clase alta suelen ser de otros estados de la República e incluso de otros países. Cada cual en su ambiente goza la vida en la costa. Comparten en espacios distintos con la misma luna naranja después del eclipse. Unos viajan en pancas o lanchas, otros en yates y avionetas privadas. En los restaurantes, por las noches los músicos tocan melodías mexicanas para los extranjeros, y algún caballero baila “Cucurrucucu paloma” con la actriz wollywoodense de los años cincuenta, y en la playa de Miramar puede apreciarse un velero forrado de foquitos de luces blancas. La Navidad se acerca, mañana es Nochebuena. Aunque las avenidas carezcan de adornos luminosos y los bolsillos estén vacíos, los corazones desbordan buenos deseos.

Marcos regresa al comedor, prueba la sopa –ahora tibia– y agradece en silencio el mejor regalo que puede recibir del Niño Dios: estar vivo en compañía de sus seres queridos y la cercanía de los que ya se fueron. Termina de comer, se levanta de la mesa, redacta una carta en su computadora y la envía por correo a las personas con las que tuvo los inconvenientes: “Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo todos los días de su vida”.





Elsa I.González ´Cárdenas

Publicado en el Diario de Colima

23 de diciembre de 2010

Manzanillo, Colima, México

jueves, 16 de diciembre de 2010

Imaginario



Hacer viajes astrales, tener sueños premonitorios, usar la telepatía para comunicarse, decir palabras oportunas en el momento adecuado sin saber qué le ocurre a la persona, reencontrar el amor antiguo después de 15 años de ausencia, sentir las energías o la presencia de seres imaginarios podría parecer una locura, pero hablar de un estado de locura donde la conciencia hace caso al subconsciente para aprovechar cada instante de la vida o transitar a otro plano que no es físico, parece un caso extraño en la sociedad.

Comprender que no todo funciona netamente mental, cambia la percepción visual.


Es algo similar a la vida del cangrejo ermitaño cuando muda de caracol para encontrar nueva cubierta acorde a su tamaño. Mudar de concha para seguir la búsqueda interior es algo que no todos los seres humanos se ocupan.

Quienes sí saben que en el camino encuentras personas extraordinarias con ideologías liberales, amigos incondicionales o pasajeros, también tropiezas con diablillos ansiosos en ver cómo tu fortaleza se debilita hasta verte caer. Ellos de alguna forma abren las puertas del autoconocimiento; son guías que te adentran a mundos distintos. Tú sólo los eliges o ignoras que existen.

En el plano terrenal no es tan difícil buscar el objeto perdido cuando se sabe cómo es.


Lo complicado es tratar de buscar algo que no conoces, saber que lo encuentras sin haberlo buscado o él te encontró a ti.

La vida está llena de causalidades –causa y efecto–. Conoces a un hombre o una mujer y tienes la sensación de haberla conocido años atrás, pero puede suceder lo contrario, tienes años viviendo con la persona y jamás han tenido un acercamiento espiritual. Cuántas parejas muertas hay en medio de tanta energía.

En la religión, rezar sirve para pensar que lo inexplicable será resuelto por Dios. Aunque indiscutiblemente haya parte de verdad, a veces habitan dentro de casa fantasmas o seres imaginarios.

Nadie de la familia creía la versión de Andy, “en casa hay un fantasma”, a excepción de los sobrinos curiosos. Se le juzgó de loca y fantasiosa. Incluso ella misma dudó en explicar sus sueños premonitorios. “Reza antes de dormir”, le decían; luego de contar sus sueños, hasta aquella noche que su madre sintió a alguien cubriéndola del frío con una sábana, entonces creyó.

Cotidianamente las cosas cambiaban de lugar de la manera más extraña. Las dejabas en la mesa y en pocos minutos estaban en la cama. La resistencia en aceptar lo que no se ve no existe, seguía predominando.

La palabra duende tiene origen a la expresión “duen de casa” o “dueño de casa”. En México los duendes son llamados chaneques, del náhuatl (“los que habitan en lugares peligrosos”), dioses menores de la mitología mexicana, espíritus traviesos con aspecto de niños que esconden cosas y se les aparecen a la gente, distrayéndolos para hacerles perder el camino o desaparecerlos.

Una creencia popular era la de usar la ropa al revés al andar solo por el monte, para así evitar que los chaneques lo atraparan y se lo llevaran, o los aluxes (maya: alux, “geniecillo del bosque, enano legendario”).

Los duendes eran hace siglos habitantes de zonas selváticas, boscosas y montañosas. Vivían en el interior de cuevas y grutas, hasta que se acercaron a hogares humanos. Se manifiestan preferentemente de noche. Tiene aproximadamente 50 centímetros de alto y son de aspecto humano. Les encanta divertirse a costa de los durmientes, molestándolos y asustándolos, aunque algunos colaboran con los hombres en las tareas domésticas. Su nombre, según algunos estudiosos del tema, proviene del árabe duar, que se traduciría como “el que habita o habitante”.

Ahora la mamá de Andy no deja de ver a un niño detrás de su hija; los sobrinos sonrientes aseguran verlos por la casa y hacen cara de espanto, mientras los demás integrantes de la familia continúan con la idea de ser fantasías.

Lo cierto es que ellos eligen con quién manifestarse. Nadie está demasiado normal para negar: “lo que no se ve no existe”.

La búsqueda interior está dispuesta a encontrarte siempre y cuando tú estés listo para ser encontrado.


Elsa I.González Cárdenas
Publicado en El Diario de Colima
16 de diciembre de 2010

jueves, 9 de diciembre de 2010

Emprendedor




Martina les cuestionó a los alumnos de nuevo ingreso, de nivel superior, entre 18 y 40 años de edad, qué harán luego de concluir la carrera. Casi todos los jóvenes a excepción de Nelly, vendedora de barbacoa en Tecomán, y Mauricio, socio de un bar lounge en Manzanillo, argumentaron estar en la universidad para conseguir un mejor empleo, ser alguien en la vida y ganar más dinero.



A los estudiantes próximos a egresar de la licenciatura les preguntó qué harían si se quedan desempleados el día de mañana y tienen familia qué mantener; un hombre respondió con semblante de sorpresa: “Nunca lo había pensado”; en cambio, una mujer sin titubear dijo: “Me pongo a trabajar en mi negocio”.



El pasado 2 y 3 de diciembre se llevó a cabo en las instalaciones de la Feria de Manzanillo, la “Caravana de emprendedores”. El movimiento México Emprende es por parte de la Secretaría de Economía, cuya misión es otorgar servicios de atención integral de manera accesible, ágil y oportuna a los emprendedores y las MiPyMEs (micro, pequeñas y medianas empresas), de acuerdo con su tamaño y potencial en un sólo lugar.



El programa ofreció conferencias de personajes de éxito, como Rodolfo Riva Palacios, el cocreador y director creativo de Huevocartoon, la cinta Una película de huevos, largometraje animado mexicano más exitoso de la historia del cine nacional.



El ponente con apariencia menor de cuarenta años de edad enfatizó sobre la explosión vocacional. Primero, consiste en descubrirla, después distinguir entre el límite genético con la limitación condicionada. La limitación genética es aquella restricción que tu cuerpo no te permite desarrollar tal actividad más allá de lo que puede hacer, como si a un niño se le pretende enseñar a tocar piano siendo que él prefiere ser defensa en un equipo de futbol.


La limitación condicionada son las barreras que el ser humano crea por miedos, pereza y comodidad. Vociferó: “Nadie puede desear lo que no conoce”, por eso es importante conocerse así mismo. Enlistó los elementos de una vida exitosa: 1. Descubrir la vocación es igual a lo que eres, 2. Desarrollar la vocación es igual a creatividad, sueños y objetivos. Una persona que está en vocación tiene placer.


Entre risas y aplausos, promedio de seiscientas personas, la mayoría preparatorianos y universitarios, estuvieron atentos a la ponencia del conferencista. Seguramente más de diez jóvenes se marcharon con la inquietud de saber qué realmente quieren hacer en su vida y cómo descubrir su vocación.





El término de emprendedurismo no está en el Diccionario de la Real Academia Española, sin embargo, es empleado para denominar a la cultura emprendedora. La idea de iniciar un negocio propio en las escuelas públicas ya no es tan lejana. La Universidad de Colima desde el año pasado opera con mujeres y hombres emprendedores que tienen las ganas de iniciar un negocio. Las incubadoras de empresas son una realidad. También la Secretaría de la Juventud participa en la gestión de hacer nuevos empresarios en el estado de Colima.



Martina, con palabras serias comentó con los alumnos de nuevo ingreso: “Entonces ¿quiere decir que hoy ustedes no son nadie? ¿Cuánto es ganar más, mil o 2 mil pesos? ¿Cuánto tiempo trabajarás para vivir cómodamente?”. Y en el otro grupo escolar dijo: “Nada es seguro en la vida, mucho menos un empleo. Si tú trabajas 16 horas en la recepción de un hotel, qué haces con las 8 horas restantes, cuántas horas le dedicas a dormir, a tu familia, y si resulta que por el estrés sufres un paro cardiaco –los alumnos rieron asintiendo–. ¿Por qué darle a ganar dinero a un empresario si puedes ganar para ti? Aprovechen la experiencia en los trabajos, pues son escuelas, después déjenlas e intenten hacer lo mismo de manera independiente. No necesitas gran capital. Claro que vas a tropezar muchas veces, aprenderás. Cuando estaba por terminar mi carrera profesional, la idea de ser empleada era fabulosa, después el panorama cambia. El estudio sólo te da las herramientas para trabajar, todo depende de lo que uno quiera, ganes lo que ganes”.



Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
09 de noviembre de 2010
Manzanillo, Colima,México

jueves, 2 de diciembre de 2010

Maquillaje


Se escucha una canción de fondo: “Sombra aquí, sombra allá, maquíllate, maquíllate, un espejo de cristal, y mírate y mírate”.


Paul, un canadiense setentero solía visitar la colonia de los trabajadores de gobierno a finales del año, cargado de una bolsa de dulces que repartía entre los niños del vecindario. “Ahí viene Paul”, se oían las voces de los infantes que corrían felices a su encuentro y a extender el brazo para recibir caramelos. Él tenía una casa en Salagua a nombre de don Armando, un vecino que hablaba perfectamente el inglés. Paul era un hombre simpático, solía vestir bermudas, camisas de algodón, huaraches, usaba sombrero de tela sobre la cabeza sin faltar la cámara fotográfica junto al pecho. Cierto año no regresó a la colonia, falleció en su país. Al morir, don Armando, dueño legítimo del inmueble toma posesión yéndose a vivir ahí con toda su familia, era su prestanombre.


Débora, soltera y sin propiedades a su nombre, solicitó visa para viajar a Estados Unidos de Norteamérica. El Consulado Norteamericano le negó la visa. Meses más tarde regresa con copia de las escrituras de posesión de un departamento exclusivo en el puerto que en realidad no era de ella, aunque sí legalmente, y con su hija de nacionalidad norteamericana, por segunda ocasión le negaron la visa.
En el tema de seguridad “la PGR propone que se castigue a quien haya prestado su nombre para constituir una sociedad o realizar una compra-venta, cuando no hay causa legal para hacerlo. Puede haber casos en los que se justifique, pero prestar el nombre para constituir una sociedad o hacer una compraventa, y luego resulta que desconocían que era ´dinero sucio´, será penalizado", dijo el procurador fiscal de la Federación, Javier Lainez Potisek, en una entrevista con Expansión CNN. Ésta es una recomendación para cortar los recursos financieros de la delincuencia organizada.


En el ámbito cultural, ¿cuántos nombres virtuales son utilizados en proyectos para aprovechar los recursos económicos del gobierno de las tres órdenes, que favorecerán a la población? ¿A quién penalizarán cuando aparezcan nombres maquillados y desmaquillados de los trabajadores de la institución que convoca a promotores culturales, artistas, artesanos, grupos artísticos, asociaciones, patronatos culturales y creadores en general, a presentar proyectos culturales? Si se es juez y parte, siendo la primera restricción para los consejeros del Fondo para el Desarrollo Cultural Municipal, donde se establece que no podrán participar las personas que integren el consejo y, sin embargo, participan con proyecto aprobado.
Uno de los objetivos específicos del programa de desarrollo cultural municipal es favorecer la participación de la sociedad civil en la planeación y el destino de los recursos orientados al desarrollo municipal, a fin de preservar, promover y difundir la cultura, tanto en sus expresiones locales como regionales, nacionales y universales.


Habiendo once campos temáticos en la selección de proyectos: 1) Difusión y animación cultural, 2) Formación artística: iniciación y actualización, 3)Fomento al libro y la lectura, 4) Capacitación a promotores e investigadores culturales, 5) Preservación, investigación y difusión del patrimonio cultural, 6) Desarrollo, promoción y difusión de las culturas populares indígenas, 7) Fortalecimiento de la infraestructura cultural, 8) Desarrollo cultural infantil, 9) Desarrollo cultural de los jóvenes, 10) Atención a públicos específicos, 11) Empresas culturales; suelen tener inclinación por algunos, año tras año, sin extender otras posibilidades.

Cambiar las reglas del juego de las administraciones pasadas y lo que se hace en otros estados de la República suena inverosímil, entonces ¿para qué convocar a la poquísima ciudadanía en meter proyectos bien intencionados si serán rechazados teniendo la preferencia el convocante? ¿Dónde está el trabajo arduo de los responsables municipales de la cultura para que la gente participe, gestione y produzca arte?


Se escucha una canción de fondo: “No me mires, no me mires, déjalo ya, no he dormido nada esta noche, y tengo una cara que no puedes mirar, porque te vas a horrorizar”.


Elsa I. González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
02 de diciembre de 2010
Manzanillo, Colima,México



foto por: www.mazcue.com

domingo, 28 de noviembre de 2010

Festival De Poesia Manzanillo



En el año 2005 se realizó el Primer Festival de Poesía en Manzanillo, Colima, instruido como parte del convenio de colaboración cultural entre el ayuntamiento de municipal, la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado y la oficina Quebec-Américas para la juventud. El festival tuvo buena aceptación en el puerto.


No era nada común que un poeta leyera en el mercado 5 de Mayo ni en la cafetería El Costeño, pero poco a poco la gente acostumbró al oído a escuchar poesía, y a su vista a verlos. En 2009 podría ser que debido al cambio de administración pública a finales del año no hubo tiempo suficiente para programarlo. Este año, la Asociación Civil Escapistas, dedicada a la difusión, creación y gestión cultural en el puerto, decide tomar la batuta para darle continuidad y hacer el 5º Festival de Poesía Manzanillo a celebrarse los días 25, 26 y 27 de noviembre de 2010.

El presupuesto para llevar a cabo este festival es parte de la mensualidad de una beca FECA (Fondo Estatal para la Cultura y las Artes) que una de las integrantes recibe para los fines de difusión al patrimonio cultural, y el patrocino de cinco personas físicas con actividades empresariales y de la empresa Operadora Internacional Colimense, S.R.L. de C.V. (Opinco), el Instituto Municipal de Cultura apoyará con el mobiliario y equipo de sonido donde se realizarán lecturas al aire libre y quizá con el transporte local de los poetas.

El diseño del cartel es de la arquitecta Marisela Becerra. Inicialmente, la intención del cartel eran olas de mar hechas exclusivamente para tal fin, sin embargo, se prefirió el grabado de nombre “La Poesía”, de de Rafael Mesina Polanco, que consiste en un pez de cuerpo transparente, de su boca salen burbujas, las costillas se pierden en el fondo de mar, debajo de él está el volcán y cerca de la cola está la luna.

Para la elección de poetas invitados a ser parte del programa del festival, Escapistas lanzó en el mes de septiembre una convocatoria en la prensa e internet y difundida en algunas partes de la ciudad de Colima y Manzanillo, donde invitaba a todos los poetas mayores de 18 años, nacidos o radicados en el estado de Colima a enviar su creaciones poéticas más reciente preferentemente inédita de 8 a 10 textos, y el Consejo Lector elegiría las mejores obras. La fecha límite de recepción trabajos fue el 1 de noviembre a las 24:00 hrs.

La asociación civil cubrirá los gastos de viáticos de los poetas únicamente el día de su participación en el festival. El Consejo Lector lo forman poetas con obras publicadas. Un total de 15 trabajos fueron recibidos, 13 en el tiempo estipulado y dos días después del cierre de la convocatoria, los cuales en automático quedaron fuera. Seis fueron los poetas seleccionados: Grace Licea, Zeydel Bernal Astorga, Noé Robledo Durón, Guillermo Clemente, Francisco Salinas y Miguel León Govea.

La elección fue de acuerdo a la autenticidad, belleza de imágenes y congruencia en los versos, al trabajo en el texto y sobre todo a la aportación que deja el poema al lector.

Todos los poetas recibieron notificación por correo electrónico, los nombres de quienes van a participar y estarán dentro del programa del festival y el resto tienen abierta la invitación, pero Escapistas A.C. no podrá cubrir los gastos de viáticos, éstos correrán por cuenta propia.
Dentro del programa, cada actividad tiene un nombre que refiere a los versos de los poetas participantes, “junto al mar las cosas alcanzan su justa proporción. Apenas existen y en algunos casos al lugar donde se harán las lecturas, “aromas de naranjo y tamarindo”, este último toma la primera palabra de un verso, el resto alude al poblado de El Naranjo, ubicación de la Universidad de Colima, y tamarindos, porque tienen muchos en el jardín del plantel.

Las sedes serán en el buque de la Armada de México, Explanada del Pez Vela, Bar Social, el bar Bora´s, Universidad Vizcaya de Las Américas, Universidad de Colima campus El Naranjo, escuela Liceo Delta, el Mercado de los mariscos y la playa de Salagua. Contarán con la presencia de poetas reconocidos: Guillermina Cuevas Peña y Víctor Manuel Cárdenas, el poeta y pintor Rafael Mesina Polanco y el joven Enrique Padilla, que amablemente el Instituto Tlaxcalteca de Cultura hará su participación en el festival enviándolo. El día del cierre está programada una lunada en la playa, amenizando el grupo de percusiones, Tambuco Fusion, del director Felipe Ramos García.

En internet podrán consultar el programa del 5º Festival de Poesía Manzanillo: http://www.escapistascolima.blogspot.com/ y Facebook: escapista ac
Este festival no tiene la difusión que merece, tampoco el gran recurso económico ni el desfile de poetas extranjeros y nacionales que en años pasados tenía, lo que le excede es un amor conjunto de todos los organizadores, participantes y patrocinadores que desean continuar con el esfuerzo y trabajo realizado desde el Primer Festival de Poesía en Manzanillo, idea que nació en el puerto.

Una de las mejores lecciones que dejará el 5º Festival de Poesía Manzanillo a Escapistas (asociación civil) es la satisfacción de hacer lo que les gusta, gestionar y producir la cultura pese a cualquier carencia u obstáculo que pudieran suscitarse.



Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colilma
24 de noviembre de 2010
Manzanillo, Colima, México

jueves, 18 de noviembre de 2010

Documentales


A ver, díganme ¿por qué les gusta el documental?, cuestiona Roberto a los alumnos del curso de “Cine y Video Documental, apreciación y acercamiento a la producción”, a lo que algunos responden: “Porque me gusta aprender, es agradable ver lo que les pasa a otras personas mediante las imágenes; el cine es ficción, prefiero la realidad, por la calidad del trabajo”.


- Maestro, ¿por qué el nombre de Festival Zanate? - Porque hay muchos zanates en Colima.


- Bueno, en los próximos años quizá no haya tantos en el estado. - Entonces tendremos que hacer un documental de cuando había zanates en Colima –argumenta–.


Al principio, el cine fue documental gracias a los hermanos Auguste y Louis Lumiére, ellos fueron quienes transmitieron por primera vez diversas imágenes en movimiento. La merienda del bebé, en 1895; La llegada del tren, en el año 1896, donde el público asistente mostró gran impresión, La salida de los obreros y El jardinero regando el césped. El primer largometraje de la historia fue Nanook of the norht (Nanuk, el esquimal), en el año 1922, con 79 minutos de duración. El crédito de dirección, guión y fotografía es de Robert J. Flahert, producida por Fréres, Revillon. Es un documental que habla sobre la dura vida de los esquimales que viven en la región de Hudson, Canadá. El rodaje le llevó más de un año realizarlo. Al regreso del director a los Estados Unidos, el interés de la audiencia fue nulo, en cambio en Europa tuvo éxito.Un documental son filmes o grabaciones de hechos y sitios reales en el momento que éstos ocurren, con personas reales que actúan espontáneamente.


La ficción difiere al documental, ésta es producto de la imaginación; hay guiones a seguir, los personajes son dirigidos, los lugares son virtuales, hay efectos especiales, objetos de utilería, sets construidos, y todo está bajo control. El documental no cuenta con guión, éste parte de una escaleta-borrador, existen registros reales; el guión surge después de grabar y generalmente no hay control.Los formatos afines al documental son docuficción o docudrama, reportaje, docureportaje, entrevista, crónica, reseña, semblanza, nota informativa, la pieza y el docuclip es la grabación de un solo cuadro con personajes en acción como la pelea de las adolescentes dentro de la escuela.El docuficción (documental de ficción) se asienta en Francia, es un nuevo género televisivo que consiste en la recreación de la realidad, basada en datos auténticos, en clave de reportaje, de un acontecimiento que aún no se ha producido, pero que podría llegar a pasar.La no ficción que sí le gusta a la gente son los boom del reality, Big Brother, y el clip documental en internet. Los temas favoritos en los canales de documentales son animales, tecnología, lo paranormal, las celebridades y lo asombroso.


Los documentalistas independientes cuentan con poco dinero, sólo pueden financiar sus gastos metiendo proyectos a concurso (fundaciones), tienen la mayor libertad en su trabajo respecto a la temática, creación, denuncia, suelen contar con equipos de bajo costo, regularmente lo conforman pocos integrantes haciendo múltiples funciones –el director es el guionista o el director es el camarógrafo–, venden su documental no para la televisión, que es algo muy difícil, pero sí en DVD, participan foros especiales y festivales.


En México hay documentalistas independientes que gracias a ellos los espectadores ven más allá de las imágenes. Para conocer el trabajo de alguno de ellos visiten la página de internet http://www.festivalzanate.com/, la cual describe: “Zanate es un Festival de Cine y Video especializado en el género documental, realizado en la ciudad de Colima, cuya principal premisa es impulsar la difusión y producción del video documental, como una alternativa de comunicación, información y entretenimiento. Es creado por la productora Gorila Audiovisual en coproducción con la Universidad de Colima (a través de la Facultad de Letras y Comunicación y la Pinacoteca Universitaria) y la Secretaría de Cultura del Estado de Colima”.


Del 18 al 20 de noviembre se realizará el 3er. Festival Zanate, de Cine y Video Documental. Valdrá la pena ir a ver los mejores documentales participantes y apoyar con la presencia el gran esfuerzo y pasión que existe detrás de un festival.


Al terminar el curso, las despedidas acompañaron a la frase: “Nos vemos en Zanate”.



Elsa I. González Cárdenas

Publicado en el Diario de Colima

18 de noviembre de 2010

Manzanillo, Colima, México

Vamos al ancla


Oscar muestra a la tía su cicatriz que lleva en la rodilla derecha, ésta pregunta: “¿Cómo te la hiciste?”, él responde: “¿Recuerda que fuimos a pasear al ancla cuando tenía tres años de edad en el carro de carreras? Usted arrempujaba, le dio muy fuerte, el auto se volcó y terminé lastimado. Aquí tuvieron que coserme”. Ella dice sonriente: “No le di tan rápido, lo que ocurrió es que quitaste los pies de los pedales, además ibas contento, cómo iba a saber que no sabías conducir”.


Claudia era la adolescente pinga de la calle. Las vecinas Laura, Vero, Taide, y Gladis la seguían mucho. Por las noches solían jugar en el edificio federal junto al canal de San Pedrito. Subían a toda prisa las escaleras interiores hasta el tercer piso, si tenían suerte llegaban a la azotea a contemplar la vista y corrían al escuchar los pasos del velador que las echaría fuera.


Ramona, a inicios de los años noventa citaba al novio en el ancla, así le nombraban a la explanada de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, porque en la pared contigua al asta bandera una ancla daba la bienvenida a los visitantes. El encuentro de las parejas era ahí, pues el lugar tenía poca luz, era tranquilo, había bancas con jardineras, estaba apacible y la brisa del mar bañaba los rostros de los enamorados.


A Fernando en los años ochenta le tocó vivir un huracán que inundó la colonia Burócrata. Él junto con algunos vecinos pasaron la noche en el edificio de ventanas oscuras y paredes grisáceas en compañía de su familia. La vida del inmueble setentero por las noches era totalmente distinta.



De ocho de la mañana a tres de la tarde, empleados de gobierno suben las escaleras para dirigirse a las oficinas a trabajar.Al atardecer, el abandono es inminente, a menos que haya guardia o trabajo por adelantar, alguna luz permanece encendida.Las carencias de arreglos en los espacios públicos o incluso los excesos son distintivos que la mente capta a través de la vista, los almacena en personajes visuales. Quién podría imaginar que debajo del cerro de tierra donde las bugambilias florean estaba una fuente que nunca fungió de fuente sino de alberca para los infantes durante la temporada de lluvias; la base del asta bandera era el estrado de los artistas de televisión, y en el estacionamiento los niños se asomaban a ver si alguna patrulla de la Policía Federal de Caminos tenía las ventanillas abiertas para meterse con la finalidad de conducir.El color natural del inmueble, cemento o quizá piedra, duró más de veinte años. Parecía la réplica en pequeña dimensión del antes Seguro Social en Salagua, el que ahora es “El Barco Hundido” del fotógrafo Pedro Cota, en su cuaderno de fotografía y literatura.Por alguna razón, todo el edificio lo iluminaron de blanco y rotularon las iniciales de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Luego vino la grandiosa idea de crear accesos adecuados para las personas con capacidades especiales o adultos mayores, nacieron rampas azules y pasamanos de fierro.


Recientemente están por concluir la colocación de la cerca de metal en las orillas de la explanada. A principios de octubre de este año, a las 4:20 de la madrugada dispararon con armas largas AK-47 y lanzaron una granada calibre 40 al Complejo de Seguridad del puerto, después del acontecimiento restringieron el acceso a los carriles de la avenida Elías Zamora Verduzco. La gente cree que es una medida preventiva. La reja divide lo público de lo privado, limita la realidad, no la elimina. Las fronteras locales ofrecen protección ante el arribo de la inseguridad. El gobierno teme que sus dependencias sean un blanco fácil para los delincuentes, pero ¿quién salvaguardará a los ciudadanos no preparados, a los jóvenes que no canalizan sus energías en actividades productivas por ignorancia, falta de motivación o porque sus padres modernos no saben educarlos?El problema es el origen, no la consecuencia. Mientras continúe la postura proteccionista encima de la educación ningún esfuerzo tendrá éxito. Guste o no la idea de unir esfuerzos entre la ciudadanía y los gobernantes, ésta debe existir. Los mismos porteños tendrán que salvaguardar sus vidas y las ajenas como sucede en los barrios bajos de la ciudad, entre ellos se protegen.


Ojalá no leamos en la prensa tiroteos de armas de fuego en las escuelas, porque ahora, desafortunadamente, todo es creíble.


Óscar, Claudia, Ramona y Fernando emigraron de la colonia y no han vuelto a pisar el adoquín del ancla aunque lo desearan, tendría que ser únicamente en horarios de oficina.



Elsa I. González Cárdenas

Publicado en el Diario de Colima

11 de noviembre de 2010

Manzanillo, Colima,México

domingo, 7 de noviembre de 2010

Detalles

"Ahí está el detalle" Cantinflas
Al llegar Isis a la recámara de huéspedes en la casa de su hermana, vio sobre la cama un corazón dibujado con pétalos de flores del desierto, bugambilias, cuatro chocolates y una tarjetita que decía: “Bienvenida al resort de Casa Encantada”. Feliz tomó fotografía para el recuerdo, imaginó a la hermana, quien horas antes había estado ahí y en complicidad con la sobrina de diez años idearon darle ese detalle.
Regularmente, los pequeños regalos tan significativos los recibimos de los novios, madres, amigos, poquísimas veces de los esposos. Hay hombres fríos que creen que basta su presencia, caballerosidad y la justificación de decir “yo no soy así”, uno debe de aceptarlos tal cual son. En cambio, existen otros que sin importar cuánto dure el romance ofrecen parte de sus creaciones artísticas: la dedicación de una fotografía, poema, libros o un viaje solitario en fin de semana. No es el interés monetario el que mueve los sentimientos, es la apreciación en el trato. Las relaciones de pareja se hacen polvo por la monotonía. Nada pasa si todo es igual. Dice Alberto Cortés en su canción: “El amor nunca se acaba, sólo cambia de lugar”.
En el mercado 5 de Mayo a veces hay un chico tocando algún instrumento musical. Pone la bocinita que da buen decibel. Las personas hacen su compra, eligen las verduras al son de las notas melodiosas. Claro que el hombre desea que le den moneditas, a eso se dedica, pero bien podría plantarse en plena esquina de la acera sin alegrar tantos corazones.
Hay una asociación en Manzanillo que suele hacer presentaciones de libros de la editorial Tierra Adentro. Uno de los integrantes recibe beca, de la cual, parte del dinero está destinado para cubrir los gastos de las actividades culturales que realizan. Tres personas se organizan en recibir al visitante en el aeropuerto, llevarlo al hotel, a comer, después al evento donde presentará su libro, luego a cenar, al siguiente día a acompañarlo a desayunar y por último dejarlo en el aeropuerto para que tome su vuelo de regreso a casa. Los escritores dicen antes de marchar: “Quiero regresar”, y hace poco uno escribió: “Cuiden esto, valdrá mucho algún tiempo”.
Un detalle trae otro detalle.Raras veces, cuando están arreglando las calles de alguna avenida, los letreros que colocan las constructoras dicen: “Disculpen las molestias causadas, estamos trabajando para usted”; esto es dar plus al cliente final.Vaya, hasta en el Panteón Municipal el administrador ofreció detalles el uno y dos de noviembre. A los visitantes los recibió con una fuente en la entrada donde habían tortugas y peces, cinco pinturas en los murales y música instrumental. Esta vez ya no había gavetas entre el monte, ni tierra en los andenes, el cementerio se achicó por el buen estado en que lo tienen.
Esos pequeños detalles reconfortan el alma. No es el valor monetario lo que siempre cuenta, sino la dedicación y entusiasmo con el que se realizan las cosas. Aunque es muy cierto, la mayoría de veces se requiere inversión, pero basta que la genialidad esté presente para idearlos, y si de plano no hay creatividad, para eso existen otras personas que pueden hacer la labor por ti. Lo importante es el presente.
En la clase de mercadotecnia algún profesor dijo: “Dar siempre un plus al cliente es lo que lo hará regresar”. Tal vez eso es lo que hace falta en la sociedad, dar algo extra sin esperar retribución o porque es parte del trabajo, y no sólo regalar detalles al ser amado, sino a la población en general. Un poco de filantropía cambiaría los escenarios y daría color a la vida.
Isis le llamó por teléfono a la hermana y agradeció la bienvenida. Minutos después quitó cuidadosamente cada pétalo, comió los chocolates, destendió la cama y durmió hasta el amanecer del día siguiente.
Elsa I. González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
04 de noviembre de 2010

jueves, 28 de octubre de 2010

Murales en el panteón

A: Melchor Álvarez Hernández.
La gente ve bien que haya pinturas en el panteón. La otra vez a alguien se le ocurrió poner un botecito con un letrero que decía: “Cooperen para el muralista”. La gente pasa y dejan sus moneditas. El Día de las Madres llegué a juntar 500 pesos.
Recibo del ayuntamiento mil pesos quincenales, y el material fue donado por Chilo, pero la verdad trabajo por puro amor al arte.A los veinte años aprendí a pintar gracias al pintor Carlos Escobar León, él fue mi maestro, aunque claro, ya tenía nociones de los colores. Él me instruyó a pintar de forma ordenada y me dio técnicas. Lo conocí cuando entré a laborar a Migración, él fue mi jefe. Luego, el mismo trabajo requería que estuviera en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y radiqué ahí veinticinco años. Uno siempre quiere regresar a su tierra, hacer algo. Desde hace tres años vivo en Manzanillo, pero tengo que volver a Laredo, dejé familia y casa.Tengo que conseguir el material para pintar, aquí no lo hay, sólo en la ciudad de Colima y es caro. La ventaja en Nuevo Laredo es que se puede pasar uno al otro lado y a comprar todo lo que necesites. También puedes exhibir tus cuadros, allá sí aprecian el arte. Algunas pinturas que hice las exhibí en Estados Unidos con amigos. Hice amistades donde radicaba, así aprendí y perfeccioné más la pintura.
En el año 2001 obtuve mi jubilación, ya deseaba dejar de trabajar ahí porque se ven muchas cosas, violaciones, deportados, muertes, sí, la cosa está fea por allá. Nunca me llamó la atención pintar sobre lo que vi, lo que hago son paisajes, marina; el mar me gusta.Estoy pintando en el panteón municipal porque le dije al administrador de ese lugar que yo pintaba, pero como que no creía, hasta que le mostré mis cuadros y parece que le gustaron. Pronto contó el proyecto que tenía pinturas en mural. Antes había cotizado con un pintor, pero salía carísimo y no se logró, conmigo hizo la propuesta y le dije que sí.Trabajo mucho, estoy en el cementerio desde la mañana. Fue muy difícil pintar durante los tiempos de lluvia porque la pintura no agarraba. He padecido dengue dos veces en lo que va del año, hay mucho mosquito. Tengo mis trabajitos pintando casas y la otra vez estuve mate y mate moscos más que darle color a las paredes.
Arribé al edificio municipal de cultura a las trece horas del jueves pasado. Llegué puntual, celebré en silencio. Tomé asiento en el sillón del pasillo. Un hombre de vestimenta sencilla, de lentes ligeramente salpicados de pintura blanca estaba sentado a pocos centímetros de mí. “Buenas tardes”, saludé. Apenas pasaron algunos minutos cuando mi impaciencia comenzó a cuestionar sobre la impuntualidad y falta de respeto que tienen muchas personas en desperdiciar el tiempo de otros. Opté mejor por cuestionarle al compañero de a lado: “¿Y usted, quién es?” Él, con voz pausada y poco titubeante, en saber qué responder, dijo: “Melchor”. “¿Qué hace o a qué se dedica?, y perdón que lo pregunte así, quiero saber si también fue citado hoy a la una de la tarde”. A lo que respondió: “Bueno, a veces pinto”. Comenzó a contar episodios de su vida laboral, y por el año deduje que debía conocer a mi padre, por supuesto indagué: “¿Entonces usted conoce a mi papá?”. “¿Quién es?”. Le di el nombre, él asintió: “Claro, es mi amigo”, y partir de ese minuto se dio unas de las conversaciones más amenas que he tenido en mi vida.
Melchor Álvarez Hernández nació en el año 1949. Creció en Manzanillo, Colima, donde vivió muchos años, por lo que dice que es manzanillense. Después de un cuarto de siglo ausente, regresó por el gusto de aportar algo a la comunidad. Ahora tiene la encomienda de pintar diez murales en el panteón municipal. Cinco están concluidos, llevan por nombre: el primero, La nueva Jerusalén; el segundo, Cristo la resurrección; el tercero, Jesús orando en el Monte de los Olivos; el cuarto, Jesucristo cargando la cruz, y el quinto, El árbol de la vida.
El próximo año iniciará “La última cena”, la barda medirá 16 por 4 metros.Ojalá muchos porteños aprecien su arte, y a quienes tienen la posibilidad de ayudar tanto empresas privadas como gubernamentales le echen chequecitos en abono en cuenta al beneficiario en el botecito que dice: “Cooperen para el muralista”, sin la necesidad de que él gestione apoyo.A las trece horas cuarenta minutos, la persona que nos citó interrumpió la plática. Para despedirnos argumenté: “Iré a visitarlo”, a lo que contestó: “Nos vemos en panteón, ahí estoy desde las ocho de la mañana”. Ambos callados seguimos el camino que aquel hombre nos condujo.
Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
28 de octubre de 2010
Manzanillo, Colima

jueves, 21 de octubre de 2010

Línea recta

Camila quería estudiar la licenciatura en Comunicación. Hizo los exámenes necesarios, y aunque apareció en la lista de estudiantes aprobados para ingresar a la universidad, jamás entró al salón de clases.Era difícil para su madre costearle los gastos de alojamiento, alimentación, pasaje y escuela. Tuvo que estudiar Contabilidad en la facultad del lugar de residencia. Al egresar trabajó en un patio de contenedores en el área contable; ahorró lo suficiente para ir a Estados Unidos. Duró poco más de un año en Los Ángeles, California. Quiso conocer Europa, viajó a España, Inglaterra, Brujas, París, Holanda y otros países cercanos. Vivió tres años en Bruselas, Bélgica.Camila trabajó de nana en el extranjero para subsistir.
Al regresar a Manzanillo empezó de nuevo. Encontró trabajo en el “departamento de la quietud”, poco hacía hasta terminar harta de no hacer nada. Renunció y consiguió otro empleo casi al mismo tiempo en que entró a estudiar la maestría. Ella es igualita a Rachel, el personaje de la caricatura “El recreo”, la niña de pecas en el rostro, tez blanca, inteligente, alta, siempre juzga lo que debería ser de lo que es, cuestiona las dudas, opina y critica para bien, vive en línea recta por convencionalismo.
Camila pareciera trotamundos, pero no lo es. Dice necesitar a alguien para hacer algo y justifica sus temores con la frase: “Eso a mí no se me da”.
Vivir en línea recta es la mejor manera de evitar problemas. Ser persona de paz, predecible, elegir bien, dar buenos ejemplos y consejos de comportamiento, al final, con los años cansa. Los rectos suelen tener seguidores, la gente los hace líderes. ¿En realidad son intocables por sus demonios o es una farsa del gran demonio que esconden? Sacar los demonios implica un redescubrimiento interno. Desaparecer de nuestra mente o al menos programarla para no sentir envidia, miedo, inseguridad, coraje, deseos hacia la mujer u hombre ajeno, no tener ganas de matar o del suicidio, caminar desnudo por la calle, gritar groserías, hablar obscenidades, corromper a la autoridad, fumar cannabis, manipular al débil, el no hacer perversiones, debe servir para algo.
Aceptar la parte oscura del alma es autoconocimiento. Los religiosos suelen decir: “Entre más cerca de Dios estés, el diablo vendrá a seducirte para que caigas en la tentación”, pero ¿qué pasa con lo mundano? ¿A caso elegir el camino espiritual es la llave para vivir sin complicaciones o aceptar sin temor quién eres, conlleva al entendimiento?La doble moral nunca perecerá.
Reprimir al personaje que actúa bajo la piel pronto saldrá a tratar de dominar al consciente. Lo hará de forma discreta, medirá territorios, verá qué tanta libertad puede poseer, si le gusta el atrevimiento o prefiere continuar en su lucha de permanecer en el encierro.
En México, los católicos optan por adormecer a los demonios, despertarlos sería pecar, ir en contra de la divinidad sin pase automático para ir al cielo. Todos tenemos flaquezas y en el hilo del camino saldremos de la recta sin percatarnos.
Los verdaderos demonios son aquellos imaginarios a los que nunca tuviste la valentía de enfrentar.
La semana pasada, por primera vez en su vida, Camila se hizo la pinta. Desistió entrar al aula junto con tres compañeras, “no tuvimos ganas de estar en clases, nos fuimos de pinta. Llegamos al café y chismeamos, luego al cine y por último a cenar sushi. Puro chismear”. Comentó feliz.
Camila a veces extraña vivir en el extranjero, argumenta que en Europa tener menos de cuarenta años, ser soltera, medir de un metro setenta y tres de estatura es poco, subir a las cajas de las bocinas a cantar y bailar en el bar, fumar porritos, ver personas desnudas en las vitrinas de Ámsterdam, estudiar y trabajar todo el tiempo, es normal. Ella espera algún día regresar, salir por las noches de su habitación para ir al departamento del amante español y no regresar durante muchos días a casa.
Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
el 21 de octubre de 2010
Manzanillo, Colima,México

jueves, 14 de octubre de 2010

Proyecto sobre ruedas

En mis últimas visitas a la ciudad de Colima he tenido la oportunidad de ver a muchos ancianos caminar en los jardines públicos, banquetas y calles. Vi a un hombre de siete décadas en la esquina de una acera, con la mirada fija en el semáforo, su intención era atravesar en silla de ruedas. Tuve nervios al imaginar cómo lo haría, quise salir del taxi donde viajaba para ayudarlo, por alguna razón no lo hice. Segundos después nos alejamos del lugar y su imagen desapareció para quedarse conmigo.Ocurrió algo similar la semana pasada en plena avenida Felipe Sevilla del Río. Los conductores y transeúntes vimos a otro hombre conducirse en silla de ruedas de motor y volante. Tranquilo llegó al otro extremo de la carretera, los mirones sentimos paz al ver su logro.
En Manzanillo, los escenarios son distintos: carencia de banquetas en buenas condiciones, calles en reparación y escasa cultura en trato a las personas de la tercera edad. A lo que pueden aspirar los viejos es a sentarse por unas horas en el jardín principal, tomar café en algún lugar cercano, leer el periódico si la vista lo permite, platicar con los amigos de antaño o los recientes para hablar del pasado y resolver los problemas del mundo.
Por si logramos librar las predicciones mayas de que el mundo se acabará en 2012, y aunque el amigo estudioso de geometría sagrada diga “esto va a tronar”, tengo ciertas reservas de positivismo, por eso me atreveré a llevarle al presidente municipal mi propuesta de “Proyecto sobre ruedas”, donde expondré la urgente preocupación que atañe a muchos seguidores imaginarios de esta columna por contar con plazas comerciales, museos interactivos para ejercitar la mente y cuerpo; bares con enfermeras y enfermeros jóvenes de muy buen ver; que los asilos dejen de tener ese nombre para llamarse “casa de descanso” con monjitas no gruñonas, centros de integración familiar exclusivo para adultos mayores despojados de sus pertenencias por parte de los familiares; pláticas de nutrición y educación sexual por aquello de la obesidad e inseminación artificial, y que en el Centro de Readaptación Social haya obras de teatro, biblioteca con internet para facebookear, y la prioridad será la contemplación de una vía férrea sobre los trazos de la ciudad cuyo propósito será que las personas con capacidades especiales y los viejos puedan transitar sobre ella sin congestión vial, esfuerzo e inseguridad.En los rieles podrán empotrarse los medios de transporte: sillas de rueda, andaderas, bastones y todo aquello que sirva para el traslado de un lugar a otro sin ayuda de un tercero. La idea es que sigan siendo personas independientes y ejerzan su derecho de libre tránsito. Ah, y para protegerse del sol o de la lluvia cada móvil tendrá sombrilla. No habrá licencias de conducir. Los rieles funcionarán con el sistema algo parecido al metro de las grandes ciudades, se recargarán con energía solar, y habrá estaciones de ruedas con rampas cada cincuenta metros para el usuario descienda.


Espero el oficio que en estos minutos redacto sea lo suficientemente contundente para que el señor presidente haga espacio para agendarme una cita, así le explicaré detalladamente el proyecto. Ojalá lo convenza, además, nadie asegura si mañana podremos caminar solos sin ayuda de nadie. Espero tener éxito, y si no lo tengo volveré a intentarlo muchas veces antes de que llegue mi jubilación o mis dolores de lumbago no vuelvan a inmovilizarme por muchos días.

Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
el 14 de octubre de 2010
Manzanillo, Colima, México

domingo, 10 de octubre de 2010

Vidrios polarizados

“Nomás porque estoy chaparrito, moreno y parezco de veinticinco años creen que soy un pendejo. Me subieron a la patrulla esos policías estatales preventivos, después de descender del automóvil cuando transitaba por el crucero de Las Hadas. Casi veinte minutos estuve detenido.
Conducía con las ventanillas polarizadas abajo, así manejo en la ciudad para evitar problemas, pero uno de ellos cuando dio la orden de que bajara del carro, le pedí tiempo mientras terminaba una llamada que tenía con un cliente. No tuvo paciencia, pateó el coche. “Mi encono vino pronto, descendí del Monza, pregunté qué infracción tenía. Argumentaron que era por circular con vidrios polarizados. Pronto respondí a la petición de mostrar la licencia de conductor, tarjeta de circulación y les mostré una de presentación. Cuestioné por qué no detenían a los demás conductores que pasaban en ese instante bajo las mismas condiciones que yo y en qué artículo del Reglamento de Tránsito, Vialidad y Transporte dice que no deben infraccionar a ningún funcionario público por traer vidrios polarizados. Hasta les saqué mi teléfono para tomar fotografías, por supuesto no lo permitieron. Señores, están violando mis garantías individuales. Si delinquí vamos ahoritita mismo a la cárcel. Lo repetí varias veces”.
El Reglamento de Tránsito, Vialidad y Transporte del municipio de Manzanillo, artículo 19, Fracción XI, Código 68-/XI.-cristales, dice: “A).- Los cristales que se utilicen en parabrisas, medallones, ventanillas y aletas laterales deberán de ser de cristal transparente e inastillable, y no estar agrietados, ni ser obstruidos con carteles u otros objetos, que impidan la visibilidad; en consecuencia, queda prohibido utilizar cristales oscuros o polarizados”.En las avenidas principales y carreteras siguen en tránsito muchos vehículos con vidrios polarizados. A los dueños no les interesa en lo más mínimo pagar un promedio de 500 pesos para quitarlos ni tampoco ellos lo harán. Traer vidrios oscuros tiene ciertas ventajas, a parte de cubrirse de los rayos del sol, una es pasar desapercibido tanto el piloto y/o copiloto ante los ojos de los mirones, como no supieran grabar de memoria el número de placas, color de auto y modelo. Las leyes deben ser respetadas con el fin de mantener el orden público y no señalar por qué fulanito no tiene infracción y yo sí. Lo más conveniente es ir a la Comisión de Derechos Humanos del Estado a presentar una queja cuando se suscite mal trato de parte de la autoridad hacia su persona para que ésta haga las recomendaciones pertinentes a tales dependencias y evitar este tipo de irregularidades. Las primeras dos semanas de 2010, la Comisión Estatal de Derechos Humanos recibió ocho denuncias por agresiones a las garantías individuales y derechos humanos, por tal razón se impartieron cursos y talleres de capacitación con policías municipales y la estatal preventiva para sensibilizarlos en el trato humano y evitar las agresiones.
Habría que capacitarlos cada dos meses para hacerles recordar el cumplimiento de su deber con los más altos principios de responsabilidad, ética y legalidad.
El chaparrito, moreno, resultó ser un chico cinco años mayor de los que aparenta, el mejor vendedor de la zona de la empresa transnacional donde labora, tiene maestría y deseos de estudiar el doctorado. Algo intuyó uno de los cuatro policías estatales preventivos o tal vez fue el único de los cuatro que recordó parte de sus acciones: “Mantener el orden, la paz y la tranquilidad pública dentro del territorio del estado y de sus respectivos municipios”. Ojalá esto no sean inicios del abuso ni prepotencia de la autoridad, porque entonces tendremos que cuidarnos de la delincuencia y de ellos también.“Después me soltaron estos tipos, pero no se vale, no soy ningún delincuente”.
Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
el 07 de octubre de 2010

jueves, 30 de septiembre de 2010

Los viejos




Él sostiene la taza de café con la mano derecha, fija la vista en el fondo del recipiente, por minutos dista de la realidad a un mundo que sólo él conoce. Recorre la cinta del recuerdo, regresa a la juventud en los años cuarenta cuando posaba a lado de mujeres bellas en el caberet El Ciros, en México, de traje nuevo, color negro y fleco fijo.Decían que era el doble de Luis Aguilar, así lo apodaban. Clava la quijada en su pijama cuadrada, sigue la pista a un ser imaginario. Comienza a hablar solo. En silencio deja atrás el comedor, camina lento con su bastón el pasillo de la casa, llega a la recámara, deja el bordón en la esquina del buró, toma asiento en medio del colchón frente al televisor de veintinueve pulgadas, columpia las sandalias para desnudar los pies, recarga el peso de los huesos hasta caer en la cama, sobre las sábanas blancas de olor a ungüento y la montaña de almohadas sudorosas bajo la cabeza. Se aferra a mirar el techo de la habitación, observa con el interés de redescubrir las imágenes. La mujer que vive con él, media década menor, no le sorprende, está consciente que los cuerpos viejos se acaban. “No te rasques la cara que la infectarás”, le dice ella sin dejar de seguirlo. A él no le importa si tiene o no granos en la mejilla, desea entretenerse. “Que no te rasques, harás un hoyo en la piel y tu cicatrización será lenta”; luego, él regresa de no sé qué dimensión, toma el papel de hombre de la casa y comienza a gritar: “Ah, qué carajos, déjame en paz, soy yo”, y maldice al televisor que no transmite bien el programa de comediantes.


Son muchas son las razones por las que no queremos envejecer: cutis marchito, piel flácida, pérdida de potencia sexual, dentadura, vista cansada, lucidez, andar lento, senilidad, desgana de aseo personal, acentuación de las enfermedades, falta de respeto e ignorancia de los adultos en cómo tratar al anciano, y la carencia de sensibilidad hacia los de la tercera edad. A parte de la difícil autoaceptación de envejecer todavía, se debe enfrentar a la discriminación de la sociedad.


De acuerdo a la información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) los resultados preliminares del Censo 2010 estarán disponibles en el mes de diciembre de este año; posteriormente, en el primer trimestre de 2011 se iniciará la difusión de resultados definitivos, por ahora las proyecciones del Consejo Nacional de Población (Conapo) muestran habría en 2010, 9’424,000 adultos mayores de 60 años en todo el país; de éstos, 5’111,436 serían mujeres y 4’312,564 serían hombres con una población media anual de 108’396,211 personas, los mayores de 60 años representan cerca del 8.70 por ciento de la población total; en 2020 tendremos 13’954,970 personas mayores de 60 años, de las cuales 6’399,054 serán mujeres, mientras que 7’556,920 hombres, una población media anual total de 115’762,289 personas en el país, se estima el 12.05 por ciento más de seis décadas de edad del total.; en 2030 a un 20’698,570 millones de mayores de 60 años, de los cuales 9’485,237 serán hombres y 11’216,333 mujeres, el 17.11 por ciento de los 120.9 millones de habitantes que tendrá el país en ese año.


En los diez municipios del estado de Colima de acuerdo al conteo de población y vivienda de 2005 con un universo de 97 por ciento, el porcentaje en hombres de 60 años y más son: Armería, 11 por ciento; Colima, 10 por ciento; Comala, 10 por ciento; Coquimatlán, 11 por ciento; Cuauhtémoc, 12 por ciento; Ixtlahuacán, 13 por ciento; Manzanillo, 7 por ciento; Minatitlán 10 por ciento; Tecomán, 8 por ciento, y Villa de Álvarez, 5 por ciento; y en mujeres con un universo de 96 por ciento: Armería, 11 por ciento; Colima, 11 por ciento; Comala, 11 por ciento; Coquimatlán, 10 por ciento; Cuauhtémoc, 11 por ciento; Ixtlahuacán, 12 por ciento; Manzanillo, 7 por ciento; Minatitlán, 9 por ciento; Tecomán, 8 por ciento y Villa de Álvarez, 6 por ciento. Información de la INEGI, año 2005.


El desinterés de darles las atenciones debidas a los ancianos en nuestro municipio es grande. Puede medirse el grado de cultura ante la vejez en la ciudad de acuerdo a las condiciones físicas en que se encuentran las calles: banquetas disparejas y obstrucción de andenes; poquísimos espacios públicos reservados en los estacionamientos de las plazas comerciales; nula señalización para la gente de capacidades especiales –pudieran ser personas de la tercera edad– y en la que los usuarios utilizan el transporte público con rampas de acceso, sillas cómodas asignadas exclusivamente para ellos, mal manejo de las unidades de parte de los conductores, poca creatividad en organizar actividades deportivas o culturales en los parques que suelen ser espacios recreativos; ver la frecuencia en que las empresas emplean a los señores y señoras en alguna función que pudieran desempeñar, sin faltar el reflejo del asilo municipal donde todo es triste y oscuro.


A cada milésimo de segundo envejecemos. Algunos tendrán la suerte de vivir más años, sólo así entenderán a los viejos, aunque sea tarde.El hombre duerme. La televisión sigue sin transmitir buena señal.


La mujer pulsa botón redondo “power”, y sale de la habitación, es hora de la siesta.




Elsa I. González Cárdenas

Publicado en el Diario de Colima

el 30 de septiembre de 2010

Manzanillo, Colima, México
Fotografía tomada de la revista voces y susurros, rumor y gritos

jueves, 23 de septiembre de 2010

Mercancía Peligrosa



Llueven gotas diminutas de miedo en el puerto. A veces se agrandan a cada hora, todo depende del color de las nubes. Puede amanecer el cielo gris un lunes 20 de septiembre a las quince horas con treinta minutos, cuando la prensa publica por internet, según los primeros reportes policiales: cinco hombres bajaron de varios automóviles, dispararon a cuatro personas, tres perecieron al instante, el cuarto murió después. Ráfaga de 20 disparos y casquillos de 0.9 milímetros afuera de una vinatería del bulevar. Los hombres en vida trabajaban en una empresa transportista con domicilio fiscal en Salamanca, Guanajuato.






El medio de transporte terrestre para mover mercancías en Manzanillo a distintas partes del territorio mexicano es por tren o camión. Por tren suelen manejar cargas de clientes asiduos y volúmenes altos con goce de buenos costos. En cambio, por tráiler las tarifas son altas y los tiempos cortos. Algo irónico sucede en algunas transportistas: los choferes desconocen el tipo de carga que transportan, sólo conducen al domicilio final de acuerdo a la instrucción recibida. Se filtra la posibilidad que un seudoimportador o exportador pague el servicio y falsee información en los papeles o un seudoagente aduanal pase por alto la revisión física para evitar tiempos muertos u otro trasfondo con la suerte de no tocar reconocimiento aduanero.




El riesgo en el área portuaria siempre está latente. Los empresarios aduanales deben de contar con empleados de suma confianza y tener supervisores con los ojos bien abiertos para evitar un mal manejo en números y no caer en ilegalidades bajo el agua. Hoy en día existen transportistas con tarifas sumamente bajas en comparación a otras establecidas desde hace muchos años. Éstas ofertan viajes a varias partes de la República mexicana para carga contenerizada, equipadas con unidades nuevas. Pudieran surgir dudas sobre la constitución de la empresa porteadora, ¿quiénes son los socios?, pero lo primordial es el buen servicio a bajo costo con el propósito de tener más margen de utilidad.




La clasificación de mercancías peligrosas se distingue por clases de: IMO 1, correspondiente a explosivos; IMO 2, a gases; IMO 3, líquidos y flamables; IMO 4, sólidos inflamables, sustancias que pueden experimentar combustión espontánea, sustancias que, en contacto con el agua desprenden gases inflamables; IMO 5, sustancias comburentes y peróxidos orgánicos; IMO 6, sustancias tóxicas y sustancias infecciosas; IMO 7, materiales radiactivos; IMO 8, sustancias corrosivas e IMO 9, sustancias y objetos peligrosos varios. IMO son las siglas en inglés de la Organización Marítima Internacional.






El transporte de carga peligrosa no está bien regulado en el puerto. A plena luz del día pueden verse a los camiones pasar por la carretera libre o autopista sin mayores precauciones en seguridad, incluso a alta velocidad. Para transportarla el conductor debe contar con una licencia especial, los vehículos estar en perfectas condiciones, llevar los portaplaquitas en los costados de la carrocería donde deben ir dentro las calcomanías que indican la clase de IMO y su nomenclatura –en mercancía general–, dicha información tiene que ser visible, expresar la leyenda: “En caso de emergencia llamar al teléfono tal, cuidado y manejo”, con el fin de que los demás conductores o cualquier persona que transite cerca guarde sus medidas preventivas. ¿Habrá otro tipo de mercancías que ponga en riesgo la vida de los transportistas? Si es así, no tardarán en ser el blanco de la delincuencia las líneas navieras y aéreas, ¿o serán ajustes de cuentas que nada tienen que ver con el medio laboral? Cualquiera que fuese la razón, más vale caminar tranquilo antes de que tu nombre aparezca en los diarios locales de una nota roja.






Seguirán las gotas de lluvia en Manzanillo, la gente se acostumbrará a cubrir su cuerpo bajo los techos de casa o en el paraguas viejo. Desaparecerá el temor por los rayos, habrá tristeza al ver que las antenas no funcionan desde hace tiempo.





Publicado en el Diario de Colilma
el 23 de septiembre de 2010
Manzanillo, Colima, México

domingo, 19 de septiembre de 2010

Independencia

En aquel tiempo acepté la invitación con entusiasmo de ir al salón de la presidencia municipal a escuchar el grito de la Independencia de México. La noche del 15, las mujeres y los hombres lucían atuendos artesanales. La gente eufórica esperó bajo el balcón al edil gritar: “Viva México”. Esa noche no llovió. De cualquier forma habría audiencia en la plazuela. Tal vez porque los padres de familia llevan a sus hijos al jardín a ver los cuetitos y al torito; los enamorados van a la cita con la novia y los vendedores ambulantes ofertan su mercancía.Es diferente la fiesta entre paredes blancas y el folclor popular, aunque el disfrute es el mismo. Después crecí y junto con amigos opté por ir al bar a tomar cerveza, tequila, ron o alcohol para celebrar. La noche la prolongábamos hasta las cinco de la mañana en alguna casa o playa.
El año pasado estuve en la ciudad de Colima en pleno jardín frente a la Catedral. La sorpresa fue ver comida por todos lados, puestos improvisados de antojitos mexicanos, flanes, pasteles, atole, tamales, algodones de azúcar y juguetes para niños. Esa noche arrojaron al aire gran cantidad de fuegos pirotécnicos más que en año nuevo en el puerto.
Este 2010 recibo invitación para ir a Celaya. Es la oportunidad perfecta para visitar la Expo Bicentenario Guanajuato, en Silao. Un terreno de 96 hectáreas, espacio multifuncional que permitirá promover la investigación científica, cultura, el mejoramiento ambiental, el turismo, el deporte, la recreación y la atracción de inversiones. Hay varios pabellones: El Pabellón de la Memoria, es un paseo a la historia de México en realidad virtual; Pabellón del Mañana, muestra el planeta alterado y los cambios climáticos; Pabellón de la Identidad, un recorrido a través la creatividad, cultura y el arte de México; Pabellón de Iberoamérica y sus Bicentenarios, El Salvador, Venezuela, Argentina, Ecuador, Chile, Bolivia, Paraguay y Colombia cumplen también 200 años de independencia; Pabellón de los Estados, exhibe la representación histórica, cultural, artística y gastronómica de las 32 entidades federativas del país; Pabellón de la Unión Europea, guarda obras artísticas que dieron su origen en la creatividad de artistas europeos radicados en territorio mexicano, y el Pabellón de las Fuerzas Armadas, exponen armamento, equipo terrestre y aéreo. Por la noche hay espectáculos musicales y obras de teatro. Dicha información puede ser vista en la página de internet de la Expo.
En el diccionario de la Real Academia Española busqué la acepción de la palabra “Independencia”, dice: 1.- Cualidad o condición de independiente. 2.- Libertad, especialmente la de un estado que no es tributario ni depende de otro. 3.- Entereza, firmeza de carácter. ¿A caso Podríamos decir que México es independiente? Cada ciudadano responde de acuerdo al grado de análisis y apreciación personal. Si planeamos la misma cuestión para con uno mismo, ¿soy independiente?, ¿cuál sería la respuesta? Lamento decir, muchos somos dependientes de algo o alguien.
Entre mis dependencias puedo citar el teléfono celular donde recibo mensajes, fotografías y llamadas informales hasta noticias a las diez de la noche; duermo a pocos metros de distancia de él y es la primera voz artificial que interrumpe mi sueño las primeras horas del día; el azúcar en el café, en el pan o alguna golosina, cuando no lo consumo voy hacia la azucarera de talavera, mojo dos dedos de la mano con la lengua, los sumerjo en la arena dulce, los levanto y succiono; la computadora para manejar asuntos laborales y sociales –es curioso, ahora escribo estas líneas en el autobús camino a Guadalajara–, además mi profesión se presta a estar diez horas frente al monitor haciendo trámites de comercio exterior. Admiro a las personas con jerarquías altas que no saben usar tal herramienta y son eficientes trabajadores. Al menos sé mi “dependencia es por elección”, desaparecerá por voluntad propia.¿Qué pasa cuando la dependencia es impuesta? Sin contar con la alternativas de elegir, y lo peor, creer que se tiene la opción. Por citar un ejemplo: “tomar leche es nutritivo”, es lo que nos venden los médicos y anuncios publicitarios, sí, lo es el primer año de lactancia, durante los demás años no es necesario y menos beber leche de una vaca que ingiere alimentos modificados para producir más líquido. El consumo de aguas de sabor light, embotelladas con el ingrediente endulzante aspartame, malo para la salud. Los desodorantes antitranspirantes en las mujeres sin la advertencia de su uso “podría ser causa de cáncer de mama”. Dirán que soy una drástica o que todo hace daño.
Considero que debe de existir responsabilidad del fabricante hacia el cliente de informar los beneficios y causa que pudiera causar el consumo del producto. La dependencia es cómoda, ¿valdrá la pena independizarnos? No cualquiera deja todo para buscar el camino sin manipulación y apegos. Por las dudas, apago la computadora y gozo mi viaje rumbo a tierras guanajuatenses.
Elsa I.González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
16 de septiembre de 2010
Manzanillo, Colima

jueves, 9 de septiembre de 2010

Taller Literario

Los músicos ensayan la canción Magia Blanca: “Magia blanca tú tienes,/ me has hechizado a mí,/ con tu mirada coqueta,/ con tu manera de hablar cuando pasando caminas,/ todos te miran a ti”, mientras Gary, la instructora del taller literario del Instituto Municipal de Cultura en Manzanillo, en la cabecera de la mesa en salón argumenta: “El arte surge de los acontecimientos políticos y sociales de un lugar”, concluye el tema. Empiezan las lecturas de textos literarios de cada integrante. El chico nuevo reparte copias de su trabajo a los compañeros, luego comienza a leer lo que considera “poemas” para la madre y de aniversario. Las ojos de algunos se fijan en las letras; otros buscan el rostro del vecino para reír en secreto. Al concluir inicia la crítica: “Así empezamos todos, falta sacar las emociones; corrígele aquí, van comas, sugiero le quites esto”; él asiente, sin timidez saca de la carpeta otro juego de hojas y las comparte. Lee Te quiero, ¡oh, sorpresa!, la pedofilia está presente en el escrito. Las miradas inquietas buscan al creador para preguntar: “¿Te gustan las niñas?”, “Yo he andado con alguien mayor, pero otra cosa es pensar en el infante para enamorarlo”. “Déjalo, cada quien sus gustos. Y qué si tú eres necrófilo”. La polémica surge hasta que la guía los calla.
En el taller literario de cada lunes, a las siete de la noche las personalidades de los talleristas salen a flote; los comportamientos juguetones entre compañeros, bromas, sarcasmo y diferencias son comunes. Lo interesante es identificar los estilos y temas de escritura que toman: Silvia escribe narrativa al estilo costumbrista; Jetzabeth, poemas de amor; Marthita, de soledad; Imelda, sobre erotismo; José, de la vida; Miguel, de la muerte; Félix, sobre protesta; Julián; del deporte y pasión; Sergio, poemas de ausencia, y Ricardo, sobre la infancia. Las edades de los asistentes es alrededor de 26 a 70 años. Los únicos requisitos para entrar al taller es aceptar las críticas de los compañeros y crear.Los talleres literarios en el puerto surgieron hace más de 15 años. El cronista Horacio Archundia tenía uno, la maestra Rosa Delia Bravo Magaña también en el antes Museo Universitario de Arqueología e Historia, campus San Pedrito; el poeta Avelino Gómez Guzmán en la antigua Biblioteca Municipal –ahora Archivo Histórico–; la maestra Guillermina Cuevas en Casa Malagua en la calle Colhuas, y posteriormente el poeta Carlos Ramírez Vuelvas, en las instalaciones viejas del Instituto de Cultura –López Mateos–. Regularmente estos grupos mueren antes de producir. Las reuniones las convierten en convivios, la gente deja de ir por falta de motivación o deciden intentar en otras expresiones artísticas. La formalidad y seriedad en guiar a los talleristas a escribir es clave de la buena formación, aunque no hay pretexto para dejar de hacerlo, los libros son los mejores maestros. Este taller promete publicar una antología de trabajos como se hizo en el taller anterior. Aunque poca atención cause para muchos la existencia del taller literario en el puerto, podría ser bien aprovechado el recurso creativo por parte de quienes pudieran interesarse. Imaginar al tallerista en la difusión de la cultura en el municipio, en las escuelas, cárceles, hospitales, asilos de ancianos, en el nacimiento de ideas para el eslogan de un producto a vender a través de la radio o medio impreso, en consulta de opiniones para llevar a cabo programas de festivales y eventos, en hacer alianzas de talleres en otros estados de la República mexicana como lo hace el Instituto de Cultura de Aguascalientes con Zacatecas y San Luis Potosí para tener apertura al intercambio de conocimiento, incluso revisar oficios mal redactados por profesionistas titulados.Sigue la melodía de fondo: “Porque eres así, fíjate en mí, no me hagas sufrir, oh magia blanca, magia blanca que te embrujo. Magia blanca tú tienes, me hacer llorar con tu castigar”. Silvia canta a coro, sus manos y cuerpo bailan; Miguel dice que ya le hartó esa canción luego de escucharla media hora sin interrupción; Gary pide auxilio: “Cállenlos”; los demás ríen tarareando la letra a excepción de Julián, quien discreto se levanta de la silla, sale del salón, regresa pronto. Hay silencio. “¿Fuiste a callarlos?”, le cuestionan, él sereno dice: “Sí, ya se habían pasado, estamos tallereando”. Las risas son largas.




Elsa I. González Cárdenas
Publicado el 09 de septiembre de 2010
En el Diario de Colima