jueves, 6 de mayo de 2010

Albatros III




La salida fue un domingo a las ocho treinta de la mañana. La pequeña embarcación turística con capacidad de diez pasajeros y dos tripulantes zarpó a dar un paseo a la bahía en Manzanillo.

Gem, para prevenir el mareo, tomó una pastilla minutos antes de salir. “Al abordaje”, gritó el patrón de lancha –encargado del gobierno de una embarcación menor–, mientras el marinero extendía su brazo para dar la mano a los seis pasajeros que brincaron del muelle a la nave.

Albatros III comenzó a navegar. Dejaron atrás el muelle del Mercado de Pescadores.
El marinero atoró cuatro cañas en la orilla de la popa .Una de ellas con rápala –señuelo artificial en forma de pez que sirve para pescar en agua salada o dulce–. A los veinte minutos se escuchó una voz: “Ya picó algo”, el marinero tomó la caña de pescar y se la dio a un pasajero. “Debes de rodar el carrete hacia delante”, comentó. Él siguió la instrucción. Un pez barrilete de dos kilos y medio salió del mar. Después de aplaudir la hazaña, quitaron la rápala y lo aventaron a un cajón de la lancha. El animal aleteó hasta morir.

Azul es el color del mar. Cuatro millas mar adentro, un jardín de malaguas rosas florecían desde el fondo; una mancha de peces saltó al exterior; las tortugas asomaron sus cabezas a la superficie, es periodo de apareamiento, el macho arriba de la hembra durante tres días. Unas gaviotas blancas volaron sobre la embarcación y los pelícanos sobre los riscos llamados “Frailes”, secaron sus alas bajo el sol.
“Antes habían muchos pez vela. Ahora tienes que ir a treinta, cincuenta millas mar adentro u ocho horas de camino para poder encontrarlos, si es que tienes suerte. Se requiere apoyo del gobierno, como se hizo con las tortugas en veda –prohibición de caza–. Deberían de poner en veda al pez picudo y otras especies. Nosotros que tenemos permiso para transitar en aguas saladas y nos dedicamos al servicio turístico, nos damos cuenta la forma tan indiscriminada de pescar. Deberían imitar a Estados Unidos, donde hay prohibición del consumo de tal animal, y si ven a una persona comprándolo, va directito a la cárcel o pagan una multa. En Michoacán también protegen a la fauna marina. Aquí no hacen nada. Bien puedes sacar cientos de peces vela sin problema. Es conveniente pagar por pescar”, dijo el marinero.

El Torneo Internacional del Pez Vela que se realiza desde 1954, goza de mucha fama debido a que en el torneo de 1957 se logró la marca mundial de ejemplares capturados, con 124 participantes y 336 piezas en tres días, por tal motivo a Manzanillo se le otorgó el título de "Capital Mundial del Pez Vela".

La tesis Relaciones entre la pesca deportiva y comercial del pez vela en el Pacífico mexicano, de René Macías Zamora, expone lo siguiente:
“Existe dualidad de intereses en la explotación del picudo, representada por un lado por los prestadores de servicios turísticos asociados a la pesca deportiva, y por otro, por las sociedades cooperativas y permisionarios de pesca comercial, complican la administración de esta pescadería”.

Los torneos de pez vela número 56 del 19,20, y 21 de noviembre de 2009, de las veinticinco embarcaciones participantes, sólo se capturaron seis velas, un marlín, un dorado y dos atunes.

Estas cifras delatan la posible extinción de especies marinas que luchan día con día en sobrevivir ante la pesca excesiva en este puerto.
Al regreso, cerca de la playa de Ventanas, una panga aguardó mientras un grupo de hombres hacían buceo. Gem le tiene amor a los timones, desde el arribo a la nave veía al patrón de lancha pilotear. No perdió la oportunidad en tomar su lugar. Por unos minutos condujo. Luego cedió el timón a poca distancia del muelle. El mar la despidió junto con la tripulación y los pasajeros en calma.


Elsa I. González Cárdenas
Publicado en el Diario de Colima
06 de mayo de 2010

2 comentarios:

  1. Me gusta cuando explicas. Me hace imaginarmelo todo. eso es genial... pero siempre vamos a leer lo que te pasa exclusivamente a ti?¿

    Me gusto saber, acerca del Torneo. ;)

    Sigo leyendote!

    Atte,
    HECVAN

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  2. Fanqui, hola! No creas que todo lo que escribo sucede en mi vida, no, eso es un error. Yo solo soy portadora de la palabra con vidas ajenas.De cualquier forma tu comentario hace que escriba temas que pudieran parecer propios.

    Gracias por leerme!

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